domingo, 8 de abril de 2018

Bicheando por el Noroeste de la Región de Murcia

El viernes 6 de abril, aprovechando el comienzo de la primavera, mi novia Patricia Martínez y mis  compañeros del Máster en Áreas Protegidas, Recurso Naturales y Biodiversidad Nerea Martínez y Víctor Orenes emprendimos camino en busca de naturaleza por la comarca del Noroeste de la Región de Murcia.

La primera parada fue en una zona llamada los "Llanos del Cagitán", integrada en la ZEPA "Sierra del Molino, Embalse del Quípar y Llanos del Cagitán". En esta visitamos un par de charcas ganaderas, las cuáles son verdaderos oasis de biodiversidad en el árido sureste ibérico. En ellas se reproducen las especies batráceas de la zona y sirven para paliar la sed de mamíferos, aves y reptiles, además de dar cobijo a numerosos invertebrados acuáticos. En ellas pudimos observar larvas del en decremento en el sureste ibérico sapo de espuelas (Pelobates cultripes) y del recién descrito sapillo moteado oriental (Pelodytes hespericus), además de numerosas ranas comunes adultas (Pelophylax perezi). A la charca acudieron también jilgueros (Carduelis carduelis) y pardillos (Carduelis cannabina) a hidratarse. Entre los cultivos de cereal destacaban las cogujadas (Galerida sp.) y en menor medida las abubillas (Upupa epops), collalbas rubias (Oenanthe hispanica) y alguna collalba negra (Oenanthe leucura). También pudimos disfrutar de la majestuosidad de las cornejas negras (Corvus corone) y del vuelo de baja altura de dos cernícalos comunes (Falco tinnunculus). En las escasas viviendas de la zona destacaban los menospreciados gorriones comunes (Passer domesticus). Entre la vegetación volaba un gran número de mariposas de la especie Papilio machaon. Cuando decidimos marcharnos, sobre un vallado apareció para despedirnos un precioso macho de tarabilla norteña (Saxicola rubetra), especie que solo puede verse por estos lugares en paso migratorio. Por último, cuando ya estabamos camino a la siguiente parada, para poner la guinda del pastel apareció planeando una bellísima águila calzada (Hieraaetus pennatus) de fase clara.


 Collalba rubia

 Pardillo común


 
Tarabilla norteña

 Papilio machaon

 Corneja negra

 Jilguero común y pardillo común

Por el camino a la siguiente parada disfrutamos desde el coche de la presencia de los recién llegados vencejos (Apus sp.) y golondrinas comunes (Hirundo rustica), así como de los estorninos negros (Sturnus unicolor), palomas cimarronas (Columba livia var. domestica) y palomas torcaces (Columba palombus).

La siguiente parada fue en la Fuente de Benízar, dentro de la zona más húmeda de la Región de Murcia. En la fuente pudimos ver una rana común y entre los chopos (Populus alba) y demás árboles de porte considerable destacaban los páridos, entre ellos el herrerillo común (Cyanistes caeruleus), el carbonero garrapinos (Periparus ater) y el carbonero común (Parus major). Los petirrojos (Erithaceus rubecula) y mirlos (Turdus merula) también se dejaban ver de vez en cuando entre el bosque. En un matorral se asomó unos segundos también una lagartija colilarga (Psammodromus algirus). También otro cernícalo vulgar nos volvió a deleitar con su planeo, esta vez desde bastante altura. Entre las enrededaderas (Hedera helix) Nerea pudo observar a un chochín (Troglodytes troglodytes). Tras comer en este precioso lugar nos dispusimos a poner rumbo a Bajil.



 Fuente de Benízar

Rana común

Antes de llegar a nuestro destino pudimos apreciar más cornejas, varias chovas piquirrojas (Phyrrhocorax phyrrhocorax) y grajillas (Corvus monedula). También pudimos disfrutar del porte de dos buitres leonados (Gyps fulvus) que iban acompañados de dos rapaces de menor tamaño, que me parecieron milanos negros (Milvus migrans), pero no pudimos corroborarlo. Al parar el coche para disfrutar del espectáculo pudimos añadir a la lista de especies unos escribanos soteños (Emberiza cirlus) que descansaban sobre un chopo.



Ya en Bajil, situado en las inmediaciones del LIC "Sierra de la Muela", pudimos ver más gorriones comunes sobre las escasas viviendas, un gran número de verdecillos (Serinus serinus) y jilgueros sobre los cultivos y alguna abubilla. También pudimos ver alondra totovía (Lullula arborea), una hembra de tarabilla común (Saxicola rubicola) en una sabina negra (Juniperus phoenicea), numerosos herrerillos comunes, carboneros garrapinos y carboneros comunes entre los pinos (Pinus halepensis y Pinus pinaster) y encinas (Quercus rotundifolia), algún escribano motesino (Emberiza cia). Un buitre leonado pareció seguirnos hasta el destino y pudimos disfrutarlo como ascendía a las cumbres de la Sierra de la Muela, donde le perdimos la pista. Entre los roquedos abundaban los aviones roqueros (Ptyonoprogne rupestris). En la zona miramos diversos cuerpos de agua, encontrando en uno restos de frezas de sapo común (Bufo spinosus) y numerosas larvas. En las siguientes charcas cercanas no pudimos contemplar ningún anfibio hasta la noche, y en una de ellas ni eso, ya que parecía haber sido limpiada recientemente porque no poseía ningún rastro de vegetación sumergida. Cuando llegamos a la siguiente parada andando, donde hicimos tiempo hasta que anocheciese, para probar suerte con fauna nocturna, pudimos disfrutar en una idílica y naturalizada charca con numeros vegetación sumergida (Chara sp.) de larvas de sapo partero bético (Alytes dickhilleni) y de salamandra común (Salamanadra salamanadra subsp. morenica). A lo lejos oímos un pito real (Picus viridis) realizar sus últimos relinchos del día, también abundaban los colirrojos tizones (Phoenicurus ochrurus) y yo tuve la suerte de contemplar uno de los últimos mirlos capiblancos (Turdus torquatus) de la temporada, puesto que ya están migrando a las zonas altas de Europa, donde si tienen suerte podrán reproducirse. 

Alondra totovía

 Abubilla
 Tarabilla común

  Colirrojo tizón


Paisajes de la Sierra de la Muela


 
Charca del Rincón de los Huertos

Larva de salamanadra común

Larva de sapo partero bético

Una vez cayó la noche nos dispusimos a volver a Bajil, por la ruta se oía a la ornitofauna decir sus últimas palabras del día, y no fue hasta llegar a las charcas cercanas a dicho caserío cuando empezó la acción. Primero vimos un adulto de sapo corredor (Bufo calamita) y posteriormente se empezaron a oír entre el estruendo de los grillotopos (Gryllotalpa sp.) los cantos del sapo partero bético. En una de las charcas que hacía unas horas habíamos considerado sin vida pudimos ver 2 ejemplares de salamandra común que acababan de culminar la metamorfosis y ya estaban a caballo entre el medio terrestre y el acuático, también alguna larva cercana a dicho estadio de desarrollo y alguna larva de sapo partero bético.

 Sapo corredor



Salamandras comunes metamórficas

Tras llegar al coche nos fuimos a un merendero cercano localizado en la pedanía de Moratalla llamada Zaén de Arriba. Aquí aprovechamos para cenar algo y echar un vistazo a otro cuerpo de agua en el que vimos varios individuos adultos de rana común. En una caseta cercana pudimos observar un par de arañas. Tras la cena pusimos rumbo a Bullas, con la intención de realizar el censo SARE de la cuadrícula.

Araña de la familia Thomisidae


Tegenaria sp.

Rana común

Una vez llegamos a las charcas del entorno de Bullas pudimos observar algunos ejemplares adultos de rana común, así como larvas y metamórficos de la especie y también larvas de sapo común. Pero lo más impresionante fueron los sapos parteros béticos, ya que pudimos contemplar varios machos con su vistosa puesta, además de disfrutar de su tímido canto. También vimos larvas e individuos juveniles y metamórficos. Para poner de nuevo la guinda al pastel a un gran día oímos mientras realizábamos el censo en una de las charcas lo que a mí me pareció un cárabo (Strix auco).




Machos de sapo partero cargando la puesta


Distinta perspectiva del sapo partero bético adulto y el metamórfico de rana común

 Sapo partero bético en detalle

Por último agradecer la compañía, las risas, la información compartida y las fotos a todos los compañeros de esta aventura que duró de 12:00 de la tarde a 1:00 de la madrugada.




Texto: Adrián Guerrero Gómez.
Imágenes: Nerea Martínez, Patricia Martínez y Adrián Guerrero.





No hay comentarios:

Publicar un comentario