lunes, 26 de junio de 2017

Taller de Anfibios de Vedema y Campo de San Juan

El pasado 12/05/2017 impartí con VEDEMA un taller sobre las amenazas y la identificación de los anfibios de la Región de Murcia.

Cartel del taller.

Tras la charla fuimos a un cuerpo de agua de Bullas para identificar larvas, puesto que en las charcas del Campo de San Juan habían hecho limpieza y se habían llevado por delante a estas (una de las amenzas de este grupo de vertebrados). Pudimos ver larvas de sapo común (Bufo spinosus Daudin 1803), rana común (Pelophylax perezi López-Seoane 1885) y sapo partero bético (Alytes dickhilleni Arntzen y García-París 1995).

Una vez trabajada la identificación de larvas fuimos al Campo de San Juan, con el objetivo de identificar adultos. La suerte no nos acompañó y solo pudimos ver adultos de rana común y sapo corredor (Epidalea calamita Laurenti 1768), aunque también se oyó cantar algún que otro sapo partero bético.

 Sapo corredor.

Rana común y pareja de Hydrous sp.

No obstante, este territorio, situado al noroeste del T.M. de Moratalla, es un oasis para los anfibios de la Región de Murcia ya que alberga citas de 7 de las 10 especies que residen actualmente en la comunidad autónoma, aunque para algunas de ellas se trate de su límite suroriental como la salamandra común (Salamandra salamandra Linnaeus 1778) o el sapillo pintojo meridional (Discoglossus jeanneae Busack 1986). Esta alta riqueza específica sucede por tratarse de la zona más humeda de la Región y también por ser una zona en la que se han mantenido los usos tradicionales del suelo.

Según la época del año en la que decidamos hacer una visita nocturna podremos encontrar unas especies u otras. Si decidimos salir con las primeras lluvias del otoño, sin bajarnos del vehículo ya podremos ver sapos corredores y sapos comunes, que estaban esperando estas húmedas condiciones para salir de sus refugios rumbo a los cuerpos de agua en los que más adelante se reproducirán; tendremos que tener especial cuidado para no atropellarlos. Una vez nos bajamos del coche y nos acercamos a los puntos de agua podremos presenciar, además de las anteriores especies, la majestuosidad de la salamandra común (Salamandra salamandra subsp. morenica), la cual, aunque nos encontremos en su límite de distribución, no está poco representada. Otra especie con posibilidad de ver en estas fechas en la zona es el sapillo moteado oriental (Pelodytes hespericus Díaz-Rodríguez et al. 2017), pero yo aun no la he visto en otoño.

 Sapo común.


Sapo corredor.


Salamandra común.

Si la visita se hace de día, estos individuos adultos ya, están refugiados, aunque con suerte levantando alguna que otra piedra (siempre dejándolas cuidadosamente en su lugar), o mirando bien entre la vegetación de alrededor de la charca (evitando siempre tocar a los individuos), podremos verlos de nuevo. Lo que sí es cierto es que la luz del día nos facilitará la observación de larvas.

 Sapo corredor encontrado bajo una piedra.

Salamandra común encontrada al descubierto, pero cerca de la vegetación de ribera de la charca. Posiblemente acabaría de realizar un parto debido a que su reproducción en la la Región de Murcia es otoñal. Esta especie es ovovivípara, por lo que no realiza puesta, si no que libera directamente las larvas en el agua.

 Larva de salamandra común.

Si la visita nocturna la realizamos con las lluvias primaverales, la cosa cambia: las salamandras adultas están escondidas, y casi todas las larvas de salamandra habrán realizado la metamorfosis; pero estos sapos que hemos visto desplazándose por las carreteras en otoño salen de nuevo, pero a reproducirse, e incluso aparecen nuevas especies no vistas en otoño como el sapillo moteado oriental y el sapo partero bético; también con el aumento de las temperatura es más fácil visualizar ranas comunes. En nuestra salida no tuvimos la suerte ni de ver al esquivo sapillo pintojo meridional ni a los sapos comunes reproduciéndose, pero si vimos una charca temporal de las que utilizan los sapillos moteados y sapos corredores para reproducirse repleta de estos.

 Rana común.



Sapos parteros béticos en los alrededores de una alberca permanente (esta especie al igual que el sapo común y la salamandra común, tienen preferencia por cuerpos de agua permanentes).

Sapillo moteado oriental.

Amplexo de sapo corredor (el amplexo es la forma de reproducción más común en los anfibios, el macho masajea a la hembra para que esta libere los huevos y él los fecunda externamente).

Para terminar quiero dar las gracias a todas las personas que me han acompañado en estas salidas: Pablo Ramírez, Miguel Guerrero, Silvia Guerrero, Lucía Salazar, Alejandrito, Patricia Martínez, Alvaro Martínez y a todos los asistentes al Taller de Anfibios que impartí con Vedema.